"13 de agosto. Un 13 de agosto de hace exactamente diez años estuve a punto de morir. Sensación curiosa, la de saber que ese, y no otro, es el momento.
Y diez años desde entonces de miradas, lugares, colores, sonidos, cansancios, temblores, ausencias, recuerdos, suspiros. Noches frías de invierno, cálidas de julio, silencios, terrores y miedos, corazón desbocado en ocasiones, y momentos de despedidas, muchas despedidas grises.
Personas que aparecen y también desaparecen en estos diez años, como los rayos de luna tras una nube.
Todo prescindible.
Quizás hubiera sido mejor.
Sí, quizás hubiera sido mejor otro desenlace aquel 13 de agosto.
Más pérdidas que ganancias, más negros que blancos.
Más expiraciones que inspiraciones.
Sin la magia del momento y sin momentos mágicos.
Sin puertas rosas que cruzar.
Y todo prescindible."
E.M.
